Cuando una empresa ha tomado la decisión de externalizar alguno de sus servicios TIC es porque tiene claro que dejar en manos de técnicos externos y expertos, algunas tareas, es una decisión inteligente.
Esto se debe a que convierte un gasto fijo en variable y aporta flexibilidad, ayudando a dimensionar las necesidades reales de la empresa cuando éstas no son constantes en el tiempo.